Una boda no solo queda en el recuerdo de aquellos que asisten a la misma por el día de la celebración, el vestido de la novia o las lágrimas del novio, sino que también prevalece el día que estos reciben la tan esperada invitación de boda y más si se trata de invitaciones personalizadas. Así pues, las invitaciones personalizadas pueden marcar la diferencia en la reacción de los futuros invitados al enlace, ya que estos se sienten más especiales a ojos de los novios.
Las invitaciones personalizadas se pueden dividir en varios tipos, los cuales pueden corresponder a todo tipo de novios cercanos a casarse. Por lo tanto, podríamos dividirlos en base a tres parámetros:
1.- La temática de la boda:
En el caso de que la boda tenga una temática en concreto, como alguna película, un grupo musical, una serie… existe la posibilidad de crear invitaciones personalizadas acorde a esto, bien presentándola en un disco de vinilo, en una entrada de cine, en un pergamino… todo ello relacionado con la temática, lo que hará que, desde meses atrás, los invitados sientan irrefrenables ganas de asistir a la boda y ver cómo ha quedado la temática expuesta.
2.- La época del año del enlace:
En este caso las invitaciones podrían llevar una imagen o una decoración que remita a la época del año en la que se lleva a cabo el enlace. En verano, se le puede dar un toque marinero usando colores azules y blancos, adornándolos con cuerdas; o bien en primavera usar muchas flores y elementos semejantes a la madera. Con estas invitaciones personalizadas nunca olvidarán la época en la que boda se celebra y podrán hacerse una idea de la linea a seguir en la ropa que han de llevar dicho día.
3.- Los gustos de los novios:
Es el abanico más amplio dentro de los tres parámetros. Este tipo de invitaciones personalizadas correrán a cargo de los novios. Ellos serán quienes decidirán en base a sus gustos personales el estilo que estas deberán tener. Así pues, pueden ir por una línea clásica y darle un toque personal con un lazo o usando formas creativas para presentarlas, como en pequeñas cajas, o en un puzzle. O bien puede seguirse una línea romántica y usar fotos de la propia pareja en el fondo de la invitación.
Muchas son las opciones a la hora de realizar una invitación de boda de una forma creativa y personalizada ¿Y tú? ¿Te decantas por alguna?